Tom Brady y Sofía Vergara están protagonizando uno de los rumores más jugosos del verano, pero no te emociones demasiado: aunque los focos apuntan a una posible pareja de portada, la realidad es bastante más relajada. ¿Estamos ante una historia de amor digna de una comedia romántica… o simplemente ante dos superestrellas disfrutando del Mediterráneo sin compromiso alguno?
Una escapada de lujo, pero sin corazones
Desde hace unos días, el ex quarterback y la actriz de «Modern Family» han sido vistos compartiendo escenarios de ensueño: yates, cenas con famosos y playas europeas. Todo empezó cuando ambos coincidieron en un superyate frente a las costas de Roma, en una especie de escapada deluxe para celebridades. Entre los pasajeros se encontraban nombres de la talla de Naomi Campbell, Kate Hudson, Kendall Jenner, Patrick Schwarzenegger, Anitta, Tessa Thompson y hasta Martha Stewart. Sí, esto suena a episodio de «The White Lotus» versión VIP.
Durante la velada, Tom incluso cambió de asiento para estar al lado de Sofía durante la cena, y la actriz colombiana no dudó en compartir en Instagram una foto donde aparece junto a él, justo en el momento en que J Balvin se acerca para saludarla con un beso en la frente. ¿Coqueteo o pura diversión entre colegas? Las fuentes lo tienen claro: no hay romance, al menos por ahora.
Sin etiquetas (y con muchos flashes)
Aunque algunos medios sensacionalistas han intentado vender la historia como una «romántica aventura veraniega», personas cercanas a la situación han puesto los puntos sobre las íes: lo suyo es una amistad con mucha química, pero sin planes de exclusividad ni noviazgo. «Llamarlo romance es ridículo», aseguran. Ambos están solteros, se llevan bien y están pasando un buen rato, nada más. Si la cosa cambia, ya lo sabremos… pero de momento, cero dramas.
Desde su divorcio con la supermodelo Gisele Bündchen, Tom Brady no ha tenido una pareja estable ante los focos. Su ex ya ha rehecho su vida junto al instructor de jiu-jitsu Joaquim Valente, mientras que Tom ha optado por disfrutar del jet set europeo. Y vaya si lo ha hecho: otro de los eventos donde brilló fue en la boda de Jeff Bezos en Venecia, donde según testigos se entregó más a la fiesta que a los flirteos.
Por su parte, Sofía Vergara también ha estado en el circuito fiestero, con una parada destacada en Ibiza, donde la vieron disfrutando del sol y del mar. Curiosamente, Tom también fue captado en esa misma isla poco después, aunque en ese caso estaba acompañado de su hija de 12 años.
¿Algo más que un verano sin compromiso?
Por ahora, todo apunta a que esta «fling» entre Tom y Sofía es precisamente eso: un desliz de verano, sin más complicaciones. Pero no podemos evitar preguntarnos si tanta cercanía, viajes compartidos y cenas con cambio de asiento podrían sembrar la semilla de algo más duradero. Porque si algo nos ha enseñado Hollywood, es que las relaciones improvisadas en yates europeos a veces terminan en los titulares más inesperados.
¿Será este el inicio del próximo power couple del entretenimiento, o simplemente una etapa digna de una historia en «Euphoria» versión madura? Tendremos que seguir atentos (o stalkeando en Instagram) para descubrirlo.
