Michael Douglas, uno de los rostros más icónicos del cine norteamericano, ha puesto en pausa su carrera interpretativa. A sus 80 años, el actor ha confesado que no tiene planes reales de volver a actuar, aunque, como buen veterano del séptimo arte, no cierra completamente la puerta. La noticia se dio a conocer durante una rueda de prensa en el Festival Internacional de Cine de Karlovy Vary, donde fue homenajeado con un premio especial.

Una decisión meditada tras seis décadas de carrera

Douglas explicó de forma tranquila pero firme que tras casi 60 años ininterrumpidos ante las cámaras, sintió que debía parar. “Tenía que hacerlo”, declaró. Y es que, aunque el actor ha afrontado retos de todo tipo a lo largo de su vida, incluyendo una dura batalla contra el cáncer, fue su incansable ritmo de trabajo lo que lo llevó a esta decisión. Dijo que no quería acabar siendo uno de esos profesionales que se desmoronan en el set, aferrados al oficio como si no hubiese un mañana.

¿Quién podría culparle? El ganador de dos Oscar lleva desde los años 70 dejando huella, desde su inolvidable papel en Wall Street hasta su entrada triunfal en el universo Marvel interpretando al brillante Hank Pym en Ant-Man y la Avispa. Su última aparición en pantalla fue como Benjamin Franklin en la serie de Apple TV+ Franklin, rodada en 2022 y emitida en 2024. Desde entonces, Douglas ha decidido disfrutar de las vistas desde la otra butaca: la del espectador (y marido de Catherine Zeta-Jones, a quien adora ver trabajar).

¿Jubilación definitiva? No exactamente

A pesar de que sus palabras han sonado a despedida, Douglas insiste en que no se considera retirado oficialmente. “Si aparece algo especial, volvería”, matizó, aunque aclaró que no está activamente buscando nuevos proyectos. Aun así, se le podrá ver junto a su hijo Cameron en la película Looking Through Water, que aún no tiene fecha de estreno. También bromeó sobre cómo su golf ha mejorado durante este tiempo sabático, mostrando que el descanso le está sentando fenomenal.

Esta pausa también le ha servido como una oportunidad para reflexionar sobre sus experiencias personales, incluidas las relacionadas con su salud. El actor fue diagnosticado en 2010 con un cáncer en estado avanzado, que inicialmente identificó como cáncer de garganta pero que en realidad fue de lengua. Afortunadamente, evitó una cirugía invasiva que podría haberle costado parte de su mandíbula y su voz, lo que habría sido devastador para alguien cuya profesión depende tanto de su presencia escénica.

Michael Douglas

Entre premios y política: Douglas sigue alzando la voz

Durante su intervención en Karlovy Vary, Douglas no solo habló de su carrera, sino también de su visión crítica sobre el clima político actual en EE.UU. Afirmó que el país está “coqueteando con la autocracia” y que teme que la política se haya convertido en un negocio más. Mostró su admiración hacia el pueblo checo por su lucha democrática, sugiriendo que lo vivido allí podría ser una lección necesaria para los tiempos actuales. “La democracia es frágil y hay que cuidarla”, sentenció, dejando claro que, aunque se aleje de las cámaras, aún tiene mucho que decir.

Tampoco faltó un momento emotivo durante el festival. Se proyectó una versión restaurada de Alguien voló sobre el nido del cuco —película que Douglas produjo y que ganó cinco Oscars— celebrando su 50 aniversario. Para un actor-productor que ha estado detrás de obras clave en la historia del cine moderno, este tipo de reconocimientos bien podrían marcar un punto y aparte ideal.

Curiosamente, Michael no es el único del mundo marvelita que ha decidido tomarse un respiro. Evangeline Lilly, su compañera en Ant-Man y la Avispa: Quantumanía y recordada por millones como Kate en Perdidos, anunció también una pausa indefinida en su carrera. Pareciera que incluso los superhéroes necesitan colgar el traje de vez en cuando.

El legado de un gigante

Douglas ha dejado claro que este paréntesis no viene cargado de tristeza ni arrepentimiento. Se muestra sereno, satisfecho y agradecido por la vida que ha construido: profesionalmente, junto a una carrera irrepetible; y sentimentalmente, al lado de su esposa Zeta-Jones y de su familia.

¿Significará esto que nunca más veremos a Michael en pantalla? Solo el tiempo lo dirá. Pero si algo ha demostrado es que incluso fuera de los focos, su voz y su presencia siguen siendo tan influyentes como cuando interpretaba a Gordon Gekko gritando que “la codicia es buena”. Qué bonito es ver a las leyendas darse permiso para parar, descansar… y disfrutar.

Edu Diaz

Edu Diaz

Friki sin remedio, piloto de Capitan Hype, con más de 10 años de experiencia creando contenido web en distintas webs. Licenciado en historia y con un master (aunque no del universo) en investigación en humanidades. Sé lo que te gusta y te lo cuento como te gusta. Fan de Star Wars, ESDLA, GoT y muchas más sagas, cazador de tendencias pop y acérrimo defensor de la pizza sin piña.